miércoles, 21 de enero de 2009
En la Nueva Era del CAMBIO, Obama reconoció como “círculo vicioso” la economía estadounidense
Líderes del mundo y “seudo economistas” experimentan pánico al cambio, ya lo cuestionan…
Parte XXI
Por Dr Giorgio Leone. De Nuestra Redacción. Semanario AmericasCaribes.
La hora de la verdad empezó a experimentar el nuevo presidente Obama.
La economía está que arde en llamas.
El pilar principal para empezar a resolver urgentemente el grave problema de la economía, pero con seguridad, para que no se aprovechen los pescadores en río revuelto, como sucedió con los 350 mil millones de dólares que el gobierno pasado le otorgó a bancos e instituciones de crédito, quienes se embolsaron los dineros de los contribuyentes sin resolver el verdadero problema que radica en que los estadounidenses están perdiendo sus casas en un alto porcentaje que llama a ponerle urgente atención.
Además, lo que urge es devolver la confianza a la población que es la que mantiene la rotación del juego de la estabilidad económica entre la oferta y la demanda, en este juego de la ruleta rusa, como resulta ser la flamante y fracasada “economía libre de mercado”.
Siendo ellos piezas claves para dinamizar la economía y sacarla de la recesión en que se encuentra. Pero para eso Obama deberá cumplir con lo que prometió de ser elegido presidente, diciendo que pondría dinero en los bolsillos de los contribuyentes para que gastaran y de esa forma regresar al estado de cosas en que se encontraba la economía antes de entrar en picada.
Nosotros reconocemos que para Obama es un mal necesario poner dinero en los bolsillos de los contribuyentes, para que la economía pueda ver si por fin se puede rescatar y proceder a los cambios estructurales para dejar de jugar como niños prendidos en juego electrónicos y para que los esquizofrénicos de los jugadores de las bolsas de valores se mantengan en su jueguito de lotería o subasta, comprando y vendiendo valores y productos, que muchas veces no valen lo que piden sino más o a lo mejor hasta menos.
Pero esa mala costumbre de esos negocios de feria, deben ser vigilados, supervisados y hasta controlados para que no suceda como fue con la multimillonaria estafa del siglo con los 50 mil millones robados por ese hábil corredor que eso aprendió en ese festival de alzas y bajas mercenarias.
Se trata nada menos que del ex presidente del Nasdaq Bernard L. Madoff, que fuera arrestado por las sospechas de haber llevado a cabo un gigantesco fraude valorado en 50 mil millones de dólares (unos 37 mil 500 millones de euros)
Aparte que las instituciones de crédito deberán proceder a negociar las deudas de los cuentahabientes de tarjetas de crédito, con fines a que estos compradores impulsivos, lamentablemente, se dispongan a gastar de nuevo y de esa manera empiece a salir de la recesión el país.
Esta irresponsable actitud de enfermar a los compradores dándoles prerrogativas para que gasten hasta lo que no pueden comprar, es una treta que han empujado al país a una irreal situación de bonanza, pues mientras las empresas pagan las deudas de los morosos clientes, todo camina bien, pero cuando se empiezan a suspender los créditos de esos morosos, los empresarios notan que sus ventas han bajado.
Es decir, que es una fantasía vivir en una economía falsa y por demás peligrosa, porque tarde o temprano, en una sociedad en donde la seguridad social del empleo no es una garantía, en cualquier momento el usuario del crédito se quedara sin ingresos para hacerle frente a sus obligaciones y parará en las empresas crediticias como insolvente.
El círculo de rotación de nuevos clientes es cierto que sigue su curso, pero cuando se estanca esa rotación, o deja de funcionar a la perfección se producen esas contracciones en la economía de los países que terminan en callejones sin salida y el estado si tiene que intervenir para salvar a grandes empresas de crédito, de la banca y las fianzas en general, jamás a pequeñas y medianas, como debería igual de suceder.
La recesión tocó fondo que hasta los fabricantes de automóviles salieron heridos, además, irónicamente, las empresas de porno que viven del negocio de recibir pagos a través de tarjetas de crédito, quienes se suponían era el negocio redondo porque hay tanto degenerado sexual que se la pasa fantaseando con esos mediocridades de cine, Internet y videos.
Estamos por lo tanto a las puertas de tomar serias y responsables decisiones en cuanto a que el estado se comprometa a ser garante de una economía sana, igualitaria en derechos y balanceada para que no vengan estos altos y bajas que restringen el comercio en general y suceden hecatombes inimaginables y arrasadoras
CONTINUARÁ...
Giorgio_leone_mia@yahoo.it
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