Líderes del mundo y “seudo economistas” experimentan pánico al cambio; ya lo cuestionan…lo atacan y se permiten faltar al respeto...
Parte XXVI
Obama de enfrenta a sus grandes detractores que se permiten tildarlo hasta de comunista por su sensibilidad social y su concepción de la realidad económica del país y del mundo.
Por Dr Georgio Leone. De Nuestra Redacción. Semanario AmericasCaribes.
Al presidente Obama le espera aún lo peor en cuanto a libetad se refiere para poder enderezar los caminos torcidos que han tomado los altos ejecutivos de bancos, funcionarios de gobierno, inversores, altos ejecutivos de órganos financistas y de las bolsas de valores. Amén de los políticos, militares, religiosos, y hasta de sus propios colaboradores que han evadido el pago de sus impuestos, etc.
Los opositores de Obama son tan radicales que ni siquiera le dieron tiempo a este presidente que se organizara en un sistema tan complejo, como resulta ser la presidencia del país más poderoso del mundo. Sobre todo para que sus políticas económicas, sociales, culturales, educativas, de salud y en todas las áreas de un gobierno responsable, serio y competente, empezaran a surtir sus efectos.
Estos detractores y serviles de los poderosos, en donde los peones de los medios de comunicación social se exhiben con la carencia de moral, dignidad y capacidad para cuestionar las políticas de gobierno de un ciudadano deseoso se servir y transformar en una sociedad justa y equilibrada, el gobierno de los Estados Unidos.
Los enemigos y asalariados de la oposición de los demócratas en el gobierno pareciera que tratan de que Obama no haga méritos para merecer un segundo mandato, y ni siquiera para que haga buen gobierno, el cual el actual presidente deberá tener para ser favorecido de nuevo con los votos para 4 años más de gobiernos demócrata y no solo 8 sino el doble porque la continuidad del cambio debe ser para por lo menos 4 períodos presidenciales o más, con miras a sentir que empiezan a surtir efectos de ese cambio enraizado, profundo y seguro.
Los cambios de una tendencia a mejorar la economía aún no se hacen presentes, porque los que más la sufren no han recibido ni una "pizca" de los beneficios para mover la maquinaria del consumismo.
Han sido los poderes económicos los que se han visto beneficiados, con el pretexto de que si no los auxilia el estado quiebran sus empresas, y al irse a la bancarrota deberán hacer despidos masivos que empeoraría la situación económica del país.
Con esta amenaza del “petate del muerto” del desempleo --que ya de por sí es un cadáver--, los excéntricos altos dirigentes de los grandes consorcios de la banca, la industria automovilística, las empresas de las tarjetas de crédito --tienen de rodillas a más de la mitad de los ciudadanos norteamericanos endeudados hasta la coronilla-- para hacer funcionar la maquinaria del consumismo y producir las grandes fortunas de los inversores que compiten con la retórica de quién es el hombre más rico del mundo, que los haga merecedores de una portada en Forbes, la revista que ensalza a los multimillonarios.
Con pena debemos confesar que vemos tibieza hasta el momento en lo actuado en la parte económica por el presidente Obama, porque no quiere correr riesgos de que se le venga el alud de inconformidades de la oposición encima y opta por pactar cediendo terreno sin entrarle de fondo y de lleno al afamado CAMBIO, del cual todos los electores se impactaron para votar por él.
Lo que estamos viendo con la política de gobierno, cuando se aproxima a los primeros 100 días de su gobierno, es la misma política de continuismo, con ciertos condimentos políticos que no trascienden en el CAMBIO que la mayoría quisiera ver para poder empezar a cambiar ellos en sus vidas.
Seguir con el machote de la economía neoliberal, de mercado infuncional, es dejar a que los de siempre sigan gobernando menos el presidente de los Estados Unidos, tal y como sucedió al anterior, al que le concedemos el beneficio de la duda en cuanto a su capacidad de gobernar, mas bien quisiéramos creer que él tampoco pudo contra los intereses de los poderosos.
Obama tiene aún la gran oportunidad para decir a esos poderes que se ocultan en los depredadores de los cabilderos que representan sus intereses económicos asfixiantes contra los pueblos que pretenden liberarse de ese yugo que no solo los esclaviza, sino los somete con crueldad a una indigna dependencia económica que no les dá oportunidad de exigir mejoras salariales y prestatarias ni superarse en ningún sentido.
Si Obama un día soñó que se puede cambiar, no Estados Unidos sino el mundo entero, no se equivocó. Todos los sueños tienen sus fantasías y sus realidades, y nosotros estamos convencidos que hay una alternativa verdaderamente humana, inteligente y sostenida de producir los CAMBIOS para que seamos parte fundamental de una sociedad que no se enciega, ni ensordece ante el clamor de los pueblos afligidos y temerosos de dejar de subsistir como lo han venido haciendo teniendo sus trabajos seguros y su estatus inamovible.
El modelo de explotación de la riqueza requiere nueva legislación, mayor atención hacia todos los habitantes y poner un hasta aquí a los desmanes, abusos, fraudes económicos por el actual sistema irregular de la economía. Tal y como se maneja y se ha concebido es para generar una jauría de delincuentes que se las ingenian con gran facilidad para embaucar a prestigiosos hombres de negocios, instituciones y empresas.
Martillar siguiendo con el actual modelo de economía de mercado infuncional no solo es un error garrafal económico que solo pueden aconsejar los doctos en materia económica que son verdaderos vivales y que lo que les importa es su estatus económico personal, recomendando un sistema anacrónico, poco inteligente e incluso que pone en ridículo la preparación académica de tanto desafortunado “profesional” que sirve los intereses de una fracción de la sociedad, pero no para perfeccionar a todo el conglomerado sino solo para satisfacer la desmedida ambición de sus patronos.
Estos economistas son indirectamente los responsables de recomendar las medidas que han llevado al caos económico al mundo, creando una casta de economistas mercenarios que han sepultado todo un sistema porque no acertaron en recomendar las medidas económicas que fueran balance, visión de futuro, practica digna y crecimiento universal sostenido con igual de oportunidades para los seres humanos de todas las corrientes ideológicas y académicas; sociales y culturales.
El mundo está de cabeza y así permanecerá porque los dirigentes se ven presionados y amenazados por los tentáculos de los poderes oscurantistas de la riqueza que tiene como cabeza de playa a los indignos cabildeadores que son los intermediaros entre los deshonestos inversionistas disfrazados en aparente acreditadas corporaciones que resultan el peor fiasco como, por fortuna, se ha ido demostrando a través de los ejemplos mas que elocuentes de los que hemos sigo testigos en los últimos meses.
U Obama le entra de lleno y a fondo al problema económico, político y social o su nombre pasara a la historia como un presidente intrascendente y símil a muchos que no hicieron nada para producir los CAMBIOS que demanda una nueva dirección en la vida de millones de ciudadanos del mundo.
Aquí no se trata de seguir protegiendo las fortunas mal habidas de gran mayoría de perezosos que se la pasan jugando golf mientras sus cabilderos les hacen su deshonesto trabajo poniendo de rodillas a gobiernos, funcionarios y políticos “pancistas” que lo que les importa es su posición política, social y económica únicamente.
Suponemos que Obama aun no ha sido admitido en el Club del clan de los poderosos que socialmente se reúnen para celebrar los grandes acontecimientos económicos que les favorecen por tener la complicidad de gobiernos entreguistas y comprometidos en una corrupción gubernamental para proteger los intereses de esa partida de vándalos que arrasan.
Dicho en buen lenguaje, Obama no es del agrado, ni estará con su mano ocupada brindando entre los círculos multimillonarios porque para ellos es humillante departir con un presidente de la raza negra que jamás quisieron que llegara al puesto más importante de la nación norteamericana.
Finalmente, debemos decir que Obama debe dar muestras de tener el control del gobierno, y no la impresión de que poco a poco está siendo dominado y desarticulado de sus pretensiones de CAMBIO, porque políticamente será una bancarrota total y se esfuma el sentimiento y deseos de las mayorías, de tener un gobierno que los proteja, los cuide, los apoye y los respete, como se sigue creyendo que lo hará OBAMA. Sin, por supuesto, descuidar la generación de riqueza para comodidad de los pueblos.
Semanario_americascaribes@Americasexpomall.com
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